La pureza y la elegancia de este reloj de oro blanco de 18 quilates lo convierten en un diseño atemporal. Para celebrar los 270 años de historia y maestría, la Maison presenta esta edición limitada de 370 piezas, certificada por el Punzón de Ginebra. La esfera presenta un motivo personalizado inspirado en la Cruz de Malta, mientras índices y agujas siguen suavemente su curva. Esta combinación armoniosa crea un notable juego de luces para quien la lleva. Por su parte, el movimiento automático se prensa para ofrecer elegancia, con un acabado «côte unique» y una discreta inscripción del aniversario. La fecha minimalista a las 6 horas contribuye al equilibrio atemporal de esta pieza, que combina refinamiento y tradición relojera.